Con el objetivo de controlar el crecimiento «descontrolado» de hipopótamos en Colombia, organismos ambientales desarrollaron la primera prueba de inmunocastración en 24 ejemplares que viven en la región de Magdalena Medio, descendientes del zoológico personal de Pablo Escobar.
Con el objetivo de controlar el crecimiento «descontrolado» de hipopótamos en Colombia, organismos ambientales desarrollaron la primera prueba de inmunocastración en 24 ejemplares que viven en la región de Magdalena Medio, descendientes del zoológico personal de Pablo Escobar.
A los hipopótamos capturados les inyectaron GonaCon, medicamento del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (Aphis, por su sigla en inglés), del Gobierno de Estados Unidos (USDA), donado a la Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare (Cornare), autoridad ambiental colombiana.
«Se trata de un anticonceptivo que tiene efectividad en machos y hembras y se implementó inicialmente en la población que se encuentra aledaña al Parque Temático Hacienda Nápoles (lugar del que escaparon los hipopótamos de Escobar)», explicó Gina Paola Serna, médica veterinaria de Cornare, citada en un comunicado de la embajada de EE.UU. en Bogotá.
El zoológico personal de Pablo Escobar
Pablo Escobar, el poderoso jefe del cartel de Medellín, importó en 1981 de un zoológico de Estados Unidos cuatro hipopótamos: tres hembras y un macho. El líder narco tenía una colección de animales exóticos en una finca de 3.000 hectáreas cerca del Magdalena y hoy dedicada al turismo.
Con el tiempo, la población de esta especie creció de manera descontrolada. Por eso los organismos involucrados esperan que la iniciativa sea una referencia «para el control de la población de los hipopótamos invasores, caso único en el planeta».
El número de hipopótamos y el territorio ocupado fue creciendo, ya que algunos se escaparon de la hacienda y se instalaron a lo largo del Magdalena, donde los locales tuvieron la oportunidad de frecuentar estos animales.
Con la donación de Aphis, el producto fue aplicado a 24 hipopótamos. Estos hipopótamos se suman a los 11 que ya habían sido esterilizados de forma tradicional previamente.
La estelización con GonaCon es más económica que la quirúrgica tradicional, que cuesta entre 6.600 y 8.000 dólares).
Hipopótamos invasores, un problema ambiental
En este momento hay identificados 80 hipopótamos que están repartidos en tres grupos poblacionales ubicados en la Región del Magdalena Medio.
Liberados en la hacienda abandonada, luego de que Pablo Escobar fuera detenido por la policía en 1993, los hipopótamos se multiplicaron. El resto de los animales, como flamencos, jirafas, cebras o canguros fueron vendidos a zoológicos.
Los expertos señalan que el particular legado del narco podría conformar la mayor manada de hipopótamos fuera de África y, por lo tanto, un problema ambiental en Colombia.
El coordinador del Grupo Bosques y Biodiversidad de Cornare, David Echeverri, explicó que «la presencia de estos animales en un ecosistema ajeno trae consecuencias como desplazamiento de nuestra fauna local, modificación de los ecosistemas y ataques» a pescadores, todo debido a que «el crecimiento de la población está descontrolado».
«Necesitamos salvaguardar los ecosistemas del Magdalena Medio, proteger nuestras especies nativas y controlar la población de hipopótamos«, añadió Echeverri.
«Estados Unidos siempre está dispuesto a ayudar a los países a controlar animales y plantas invasoras. Entonces, cuando nos llamó Cornare, teníamos los expertos y el producto que pensamos podría ayudar», afirmó Jeromy McKin, agregado de Agricultura de USDA APHIS en la Embajada de Estados Unidos en Colombia.