La muerte de El Noba dejó un proyecto sin cumplir. El músico quería hacerle una casa a su hija y días antes del accidente había comprado el terreno y mostrado fotos en las redes sociales. Sus amigos saben lo importante que esto era para él, por eso iniciaron una colecta en las redes que cayó muy mal entre los usuarios.
“Artistas, colegas, compañeros, empresarios del medio, de la industria, amigos y seguidores de Lautaro El Noba. Todos quieren colaborar con la familia y seguir con los sueños y metas de Lauti. Se armó una cuenta para transferir o depositar. El alias es Todosposelnoba”, se leyó en el posteo que compartieron algunos de sus allegados, como La Joaqui.
Indignados y preocupados por la situación del país y de sus bolsillos, muchos deslizaron que hay una persona indicada para terminar la casa de El Noba. “Hay gente que realmente necesita. El Noba salió sin casco y no pensó en la hija. Antes de pedir colectas por qué no le piden a L-Gante, su amigo, que tiene millones. Él se la va a terminar. Si eran muy amigos ¿para qué pedirle a la gente, que apenas le alcanza?”, expresó una mujer en las redes.
La tristeza de L-Gante tras la muerte de El Noba
El viernes pasado murió El Noba, el cantante de cumbia que el 24 de mayo chocó con su moto en Florencio Varela. L-Gante, uno de sus grandes amigos de la música, lo despidió con prufunda tristeza en su cuenta de Instagram.
“Siempre fuiste pibito a cara de perro con nosotros, al igual que nosotros contigo. Sabemos que venías de abajo, como cada uno de nosotros. Por eso disfrutamos y nos llenamos de orgullo al verte de triunfar, al verte brindar un bienestar para tu familia y, sobre todo, al verte brillar”, escribió consternado.
Acto seguido, añadió: “Se nos fue un amigo. Estamos con un dolor y una bronca inmensa por tu partida. Tenés nuestro aguante. Vos y tu familia. Atentamente, la mafilia 420. Los turros con los turros, papá”.
Elian Valenzuela se solidarizó con la familia del cantante y lamentó su terrible partida, que tal vez se pudo haber evitado con el uso del casco. Ahora tiene una mochila sobre su espalda: la gente quiere que colabore económicamente para terminar el “palacio” que su hermano del alma quería construirle a su hija.