Derrotó 1-0 a Argentinos con un gol de Luis Vázquez. Ahora aguarda por Talleres o Godoy Cruz para ir por el título que ya ganó en 2012 y 2015.
Boca sufrió más de la cuenta para dejar en el camino a Argentinos y necesitó de las atajadas de Agustín Rossi para lograr la clasificación. Sin jugar bien, pero con el oportunismo goleador de Luis Vázquez, el equipo de Battaglia se impuso 1-0 en Mendoza y dejó atrás una seguidilla de dos derrotas que alteró el orden y la paz.
Más allá de no haber desplegado todo su fútbol, Boca está en la final y quedó a un paso de cerrar el año de la misma manera que lo comenzó: saliendo campeón. Ahora deberá esperar por el ganador entre Talleres y Godoy Cruz, que el viernes 12 jugarán la otra semifinal.
Argentinos fue un rival incómodo para Boca. El conjunto de Milito salió a imponer condiciones y contó con las situaciones más claras para abrir el marcador. Allí apareció la figura de Agustín Rossi para decir presente y clausurar el arco.
A los 22 minutos le anularon bien un gol a Nicolás Reniero por posición adelantada. Más allá de que lo reclamó enérgicamente todo el banco de Argentinos, la acción estuvo bien invalidada porque el que estaba en offside era Gabriel Ávalos, que incidió en la jugada.
Boca contó con la vuelta de Sebastián Villa después de más de 100 días de ausencia. El colombiano participó poco en el juego y se lo notó falto de ritmo.
Claypole, Defensores de Belgrano, River, Patronato y Argentinos. Se viene Talleres o Godoy Cruz. A Boca le queda un escalón para quedarse con la Copa Argentina, como ya lo hizo en 2012 contra Racing y en 2015 ante Rosario Central.