Con un tanto de Micheal Santos, a 12 minutos del final, la «T» venció 1-0 al «Taladro» en Rosario y se metió en el partido decisivo, que jugará el domingo ante el ganador de Boca y Patronato y que le puede otorgar un boleto a la Copa Libertadores.
Talleres, de Córdoba, que se vio superado por Banfield durante la mayor parte del encuentro, finalmente logró clasificarse a la final de la Copa Argentina al mejorar en el tramo final y con el oportunismo del uruguayo Michael Santos, que generó un error defensivo del rival a los 33 minutos del segundo tiempo, terminó imponiéndose por 1 a 0.
De este modo, el conjunto cordobés llega por segundo año consecutivo a la final de la Copa Argentina, que ofrece una plaza para la fase de grupos de la Copa Libertadores 2023.
En cambio, Banfield que había llegado a las semifinales en su mejor desempeño histórico en el certamen bajo la conducción de Claudio Vivas y con el goleador del torneo, Jesús Dátolo (4), paradójicamente ambos despedidos hace pocas semanas, esbozó una vez más su falta de resolución para convertir lo que genera.,
En los primeros pasajes del juego fue Banfield el que tomó la iniciativa con la mayor posesión de la pelota y la continua rotación de sus volantes y delanteros, bajo la conducción de Nicolás Bertolo.
Así pudo generar algunas aproximaciones peligrosas hacia la valla adversaria, aunque algunas erróneas decisiones para definir y la firme defensa cordobesa le impidieron sacar alguna ventaja.
A la vez, Talleres, con el repliegue de su última línea para contener el embate banfileño, se dispuso atento para generar algunas rápidas réplicas en busca de sacar provecho por algún espacio que dejaba el rival en su adelantamiento.
En esas llegadas que generaba el ‘Taladro’, contó con una muy clara por la asistencia de Juan Cruz para la espada de Ramiro Enrique, que al superar a Matías Catalán remató desde una posición incómoda ante la salida de Alan Aguerre, por lo que el tiro se le fue desviado, a los 24 minutos.
Más tarde, sucedió una curiosa y desgraciada situación debido a que ante una pelota que salió al lateral, después que la defensa de Banfield cortara un avance adversario, el extremo derecho de Talleres Diego Valoyes, pateó muy fuerte la pelota para descargar su bronca.
Eso derivó a que la misma rebotara en uno de los carteles publicitarios y fuera a golpear en el parietal izquierdo del juez de línea número 2, Gabriel Chade, que estuvo aturdido por un par de minutos y que por esa acción el árbitro Germán Delfino terminó por amonestar al colombiano.
Posteriormente, el técnico todavía interino de Talleres, Javier Gandolfi, que podría ir al cuerpo técnico de Martín Demichelis si este asume en River, optó por realizar dos cambios en busca de mejorar el accionar del equipo con los ingresos de Gastón Benavidez por Julio Buffarini y Gonzalo Álvez por Francisco Pizzini, a los 39 minutos del primer tiempo que poco le aportaron.
Por otro lado, en los instantes finales del primer capítulo, Banfield debió sustituir al lateral izquierdo venezolano Luis Mago al recibir en forma accidental un fuerte golpe en parietal derecho, con un pequeño corte, por un codazo de Diego Valoyes, ingresando Áaron Quirós
Otro cambio obligado sufrió el equipo bonaerense, a poco de iniciado el segundo tiempo por una fuerte dolencia muscular en la pierna izquierda que acusó Bertolo, suplantado por Julián Palacios.
A todo esto, el juego continuó con el predominio de los dirigidos por Javier Sanguinetti y al igual que en la primera parte, con llegadas peligrosas pero sin la precisión necesaria para resolverlas.
El opaco trabajo del conjunto cordobés recién comenzó a iluminarse al promediar el último capítulo, así fue que Valoyes pudo generar la primera ocasión en el partido de un remate peligroso para el arco de Facundo Cambeses, que lo supo contener, a los 20 minutos.
Los de la ‘T’ crecieron en su labor a la medida que su rival acusó el cansancio de algunos de sus valores, que le hicieron disminuir su rendimiento.
Fuente Télam