El ministro de Economía recibió a representantes de bancos y compañías de seguros que operan en el país y explicó los lineamientos del canje y, sobre todo, aclaró que la medida busca despejar incertidumbre acerca de los vencimientos de 2023.
El ministro de Economía, Sergio Massa, afirmó que «tener un perfil de deuda ordenado y previsible es fundamental para el sistema financiero, para el Estado y para el ahorrista», al presentar este mediodía ante ante una docena de representantes de entidades bancarias un nuevo canje voluntario de la deuda en pesos que vence en los próximos meses.
En ese marco, el ministro destacó que la medida «rompe con la idea de que Argentina está todas las semanas a la puerta de un reperfilamiento de deuda, todos esos fantasmas se despejan. Desactivamos la idea de la bomba, de que cada dos o tres meses algo está a punto de explotar».
Según lo expresado por Massa, la iniciativa otorgará al mercado de deuda en pesos «una curva de vencimiento 2024, 2025, mucho más ordenada, asociada además al programa de orden fiscal».
Las palabras del titular del Palacio de Hacienda se dieron en el marco de la reunión que mantuvo este mediodía con una docena de representantes de bancos nacionales y de capitales internacionales ante quienes expuso su propuesta de «reordenamiento de la deuda pública», que prevé la implementación de nuevo canje para los vencimientos de bonos en pesos con vencimiento previstos para los próximos tres o cuatro meses.
En la ocasión, Massa sostuvo que «ya tuvimos algún momento un reperfilamiento de la deuda en pesos, vimos la frustración, el dolor y el fracaso que significó para la Argentina y entendemos que tener un perfil de deuda ordenada, previsible, es para el sistema financiero fundamental, para el Estado fundamental y para el ahorrista y el ciudadano una tranquilidad enorme».
Y continuó explicando que «romper la incertidumbre alrededor de si el Estado es capaz de financiarse en el mercado de ahorro interno de deuda local era fundamental, y este salto de la montaña como la llamaban muchos, leí en algún medio ‘hay olor a reperfilamiento’, todos esos fantasmas se terminan».
Sobre los desafíos que le competen al Gobierno, dijo que «bajar el gasto público de nuestra parte descomprime la idea de tener que andar permanente buscando financiamiento o buscando adelantos transitorios del Banco Central».
En la misma línea, el ministro anticipó que «vamos a además a ordenar intraestado a la deuda, tenemos los vencimientos del tercer y cuarto trimestre que tienen mucho peso del sector público nacional, que eso a veces también desordena y genera incertidumbre».
Y concluyó: «Que esa curva ordenada no sea solamente producto del esfuerzo, del trabajo de los bancos, de la compañías de seguro y del Ministerio de Economía , sino que también tenga como correlato la responsabilidad del Estado para enderezar esa curva y hacer previsible y darle tranquilidad a los argentinos».
En la reunión, por el lado de bancos estuvieron el presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Claudio Cesario; el titular de la Asociación de Bancos de capitales argentinos (Adeba), Javier Bolzico; el gerente general de Banco Macro, Gustavo Manriquez; el CEO del Banco Santander, Alejandro Butti; el gerente general de ICBC, Alejandro Ledesma; el titular del Credicoop, Carlos Heller; el tesorero del HSBC, Federico Alcalde Bessia; el gerente general del Banco Galica, Fabian Kon; el presidente de Banco Patagonia, Oswaldo Perré dos Santos; el presidente de BBVA, Martín Zarich; la gerenta de Finanzas del Banco de Santa Fe, Lenticia Canclini; y el director del Banco San Juan, Claudio Canepa.
Fuente: Télam