La OTAN afianza su vínculo con Ucrania y el G7 le promete armas para pelear con Rusia

La alianza conformada por Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá brindará «asistencia de seguridad y equipo militar, defensa aérea, artillería y dispositivos de largo alcance», entre otros insumos en favor de Kiev. El gobierno de Rusia calificó el anuncio como «potencialmente muy peligroso».

Los líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) lanzaron este miércoles un nuevo foro de relaciones con Ucrania en el último día de la cumbre de la alianza militar en Lituania, en el que el G7 prometió a Kiev ayuda militar a largo plazo para pelear con Rusia, luego de que el presidente Volodimir Zelenski criticara a sus aliados por demorar el ingreso de su país a la OTAN.

El presidente estadounidense, Joe Biden, y los demás líderes de la alianza atlántica se reunieron con Zelenski en el nuevo Consejo OTAN-Ucrania, un órgano permanente para que los 31 integrantes de la OTAN y Ucrania mantengan consultas y convoquen reuniones en situaciones de emergencia.

La idea es parte de esfuerzos de la OTAN para estar tan cerca como sea posible de Ucrania sin incorporarla, porque su tratado fundacional tiene una cláusula que establece que todos sus miembros deben acudir en defensa de cualquier otro que esté bajo ataque, por lo que la alianza debería declarar la guerra a Rusia si Ucrania fuera incorporada antes de que termine ese conflicto.

El martes, en una declaración que resumió el primer día de discusiones en Vilna, los líderes de la OTAN dijeron que Ucrania podrá ingresar «cuando los aliados estén de acuerdo y se cumplan las condiciones».

La decisión decepcionó a Zelenski, que dijo que era «absurdo» que una alianza militar que tiene como uno de sus fines contener a Rusia no tuviera aún un calendario para el ingreso de Ucrania.

En otro fuerte gesto a Ucrania, los líderes del G7 se encontraron con Zelenski al margen de la cumbre de la OTAN en Vilna, la capital lituana, y anunciaron un plan de apoyo militar a largo plazo que incluye la entrega de equipamiento bélico a las fuerzas ucranianas, que desde hace 500 días resisten una invasión rusa.

En un comunicado, el G7 dijo este miércoles que trabajará con Ucrania «en acuerdos y compromisos de seguridad específicos, bilaterales y a largo plazo para (…) asegurar una fuerza sostenible capaz de defender ya a Ucrania y disuadir las agresiones rusas».

Esto incluye «asistencia de seguridad y equipo militar moderno, en dominio terrestre, aéreo y marítimo, priorizando la defensa aérea, la artillería y dispositivos de largo alcance, vehículos blindados y otras capacidades clave», agregó la nota.

En el encuentro, Biden dijo que el plan de las siete potencias -Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá- ayudará a Ucrania a construir un poderoso dispositivo de defensa aun cuando el país no sea miembro de la OTAN.

«Los ayudaremos a construir una defensa sólida y eficaz por tierra, mar y aire», declaró Biden, que añadió que «el futuro de Ucrania está en la OTAN».

Zelenski dijo que el compromiso del G7 era una «victoria importante» para la seguridad de Ucrania, aunque dejó en claro que «la mejor garantía de seguridad para Ucrania es ser parte de la OTAN».

«La delegación ucraniana regresa a casa con una victoria importante para la seguridad de nuestro país, de nuestro pueblo y de nuestros niños», declaró el presidente de Ucrania.

Zelenski se mostró este miércoles más conciliador que el martes, y aunque agradeció la iniciativa del G7, volvió a lamentar que la OTAN no haya presentado un cronograma para la entrada de su país.

«Los resultados de la cumbre son buenos, pero lo ideal sería que hubiera una invitación» formal a Ucrania para sumarse a la OTAN, dijo Zelenski en una conferencia de prensa junto al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

La OTAN, en tanto organización, proporciona a Ucrania ayuda militar no letal, pero no armas ofensivas, algo que sí hacen algunos de sus países miembro, con Estados Unidos a la cabeza.

Funcionarios de Estados Unidos y Alemania apuntaron este miércoles que las condiciones para el ingreso de Ucrania a la OTAN no atañen solamente a cuestiones militares, sino también a reformas para proteger la democracia y el Estado de derecho en la exrepública soviética, donde la corrupción es una preocupación para Occidente.

«Ningún país está exceptuado» de esas condiciones, dijo el jefe del Gobierno alemán, el canciller federal Olaf Scholz.

Zelenski, de todos modos, dijo que esperaba la incorporación a la alianza y que su país hará lo necesario para lograrlo.

«Tengo confianza en que después de la guerra, Ucrania estará en la OTAN. Haremos todo lo posible para que eso ocurra», dijo Zelenski junto a Stoltenberg.

En Rusia, el Gobierno del presidente Vladimir Putin dijo que veía los anuncios del G7 en Lituania como una amenaza para su país.

Este plan de compromisos socavará la seguridad de Rusia, y hará que Europa sea «mucho más peligrosa durante años y años», dijo Dmitri Peskov, el vocero de Putin y del Kremlin, que el martes había calificado la cumbre de la OTAN como una «cita antirrusa».

Alemania anunció el martes que proporcionaría más tanques, defensas antimisiles Patriot y vehículos blindados por valor de 700 millones de euros.

Francia, en tanto, anunció que estaba enviando misiles de largo alcance tipo Scalp y una coalición de once naciones informó que comenzará a entrenar pilotos ucranianos en el uso de aviones caza F-16 a partir de agosto.

En la cumbre de Vilna se debatió también el posible ingreso de Suecia a la alianza, después de que Stoltenberg asegurara que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, les prometió a él y al primer ministro sueco, Ulf Kristersson, que enviará «lo más pronto posible» al Parlamento turco el Protocolo de Adhesión de Suecia para que sea votado.

El acuerdo, fruto de intensas negociaciones, deja la puerta abierta a una nueva expansión de la alianza en el norte de Europa, luego de que Finlandia se convirtiera en abril pasado en el miembro número 31 de la OTAN.

Como parte del acuerdo, Stoltenberg dijo que Erdogan prometió acelerar el tratamiento parlamentario de la ley de adhesión de Suecia a la OTAN. Se espera que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, otro que se resistía, asuma el mismo compromiso.

Erdogan aclaró este miércoles que el Parlamento de su país no podrá ratificar esta adhesión antes de octubre debido al receso estival del Congreso.

«Hay dos meses de receso parlamentario» y cuando los parlamentarios regresen «habrá muchas propuestas legislativas que se discutirán por orden de importancia», explicó el mandatario turco, respondiendo a un periodista que le preguntaba sobre si la adhesión podría ser ratificada en octubre.

«Pero nuestra intención es acabar con esto cuanto antes», aseguró Erdogan al margen de la cumbre de la OTAN.

«Cuando se abra la sesión del Parlamento, creo que su presidente estará de acuerdo en darle prioridad a este acuerdo», agregó.

Fuente Télam