El histórico capitán decidió dar un paso al costado luego del mal resultado en el Sudamericano Sub-20, que no logró la clasificación al Mundial.
A varias semanas de la eliminación en el Sudamericano, Javier Mascherano renunció a su cargo como entrenador de la Selección Argentina Sub-20 luego de varios días de incertidumbre.
El entrenador se identificó como el responsable de no clasificar al Mundial de la categoría, tras no avanzar a la segunda etapa del torneo que se jugó entre el 19 de enero y el 12 de febrero en Colombia.
De este modo, la Argentina, máximo ganador mundial de la categoría, estará ausente en la Copa del Mundo que se jugará en Indonesia, del 20 de mayo al 11 de junio de este año. Además, también se perdió la posibilidad de participar de los Juegos Panamericanos de Santiago que se disputarán del 20 de octubre al 5 de noviembre.
La gota que rebalsó el vaso fue la caída frente a Colombia por 1 a 0 en el estadio Pascual Guerrero de Cali, que derivó en la eliminación antes de que se dispute el hexagonal final del Sudamericano. En ese entonces, ya había renunciado al cargo, pero permaneció hasta hoy pensándolo.
«No hay demasiado que pensar. Obviamente, sí agradecer a todos. Al presidente -Claudio Tapia-, por la oportunidad. A los clubes, porque siempre nos han dado una mano, nos han dado los jugadores; los hemos molestado mucho durante todo el año, inclusive ahora, durante toda la preparación», comentó.
«No tengo mucho por decir: no hay excusas. Acá el que falló soy yo y tengo que hacerme cargo», manifestó el exjugador de River y Barcelona, entre otros clubes. Por su parte, el presidente de la AFA respaldó su continuidad: «Es el camino que hemos elegido y el camino que queremos andar todos. Seguiremos sembrando para cosechar».
Tras casi dos años en la AFA, primero como director del Departamento de Metodología y Desarrollo, un programa amplio e integral para las selecciones masculinas y femeninas, y luego como reemplazo de Fernando Batista, el excapitán de la Selección Argentina se aleja.