En Santiago del Estero, el Xeneize de Sebastián Battaglia superó por 4-2 al Patrón tras igualar 0-0 en los 90 minutos. A dos partidos de meterse en la Copa Libertadores 2022, ahora espera por Argentinos Juniors o San Telmo. Juan Ramírez se retiró por una lesión en la rodilla
Boca es el primer semifinalista de la Copa Argentina! El Xeneize de Sebastián Battaglia superó por 4-2 a Patronato, por penales, tras igualar 0-0 en los 90 minutos en el Estadio Único Madre de Ciudades de Santiago del Estero. Ahora, espera por el ganador del cruce entre Argentinos Juniors y San Telmo.
Los primeros 10 minutos fueron para Patronato, sin una superioridad marcada, pero con un orden que lo hacía ganar en la mitad de la cancha gracias a ese 4-4-2 que propuso Iván Delfino. Boca, por su parte, se adueñó de los siguientes 15 y tuvo tres chances: dos de Nicolás Orsini -en una pecó de generoso por dársela a Norberto Briasco- y un remate mordido del ex Huracán que pudo prometer más si es que levantaba la cabeza y lo veía entrando solo a Edwin Cardona más abajo.
Fue poco lo del colombiano, apenas algunas apariciones y un remate de tiro libre que Matías Ibáñez controló en dos tiempos. También lo de Juan Ramírez, quien no encontró sociedad con los de arriba. Sin mucho más para resaltar, el partido se desdibujaba de camino al entretiempo, justo cuando el juego se volvía más friccionado y las tarjetas amarillas tomaban el protagonismo.
Zafó el Patrón de quedarse con uno menos porque el árbitro Pablo Echavarría le salvó la vida a Gabriel Gudiño tras dos duras infracciones al hilo. Pasado el peligro, los de Delfino tuvieron dos buenas oportunidades sobre el final: Nicolás Delgadillo probó los reflejos de Agustín Rossi con un remate a la carrera y luego cuando se iba solo al arco de Boca en una contra, Echavarría hizo sonar su silbato.El segundo tiempo arrancó con algunos contratiempos para Boca: Ramírez duró menos de un minuto y pidió el cambio -en el banco le pusieron hielo en la rodilla izquierda- y después Rossi salió lejos y a destiempo para intentar descolgar un centro. Gudiño casi factura con el arco vacío.