Pablo Ashworth, el hijo de Jorge Ashworth, está detenido por el crimen de su padre. Se lo confesó a su pareja y todo tendría trasfondo económico.
Pablo Ashworth, el hijo de Jorge «Tedy» Ashworth, un veterinario hallado carbonizado a comienzos de mes en su camioneta en la provincia de San Luis, hizo una fuerte confesión sobre el crimen de su padre.
«Le metí un tiro a papá y lo maté», habría revelado el acusado a su actual pareja, después de cometer el supuesto parricidio. De todos modos, para la defensa está confesión carece de validez, ya que no fue realizada ante la Justicia.
«Teddy», que además tenía dos hijas, una bióloga y otra odontóloga, fue atacado y murió calcinado dentro de su camioneta, en su campo, en San Pablo, a unos 10 kilómetros de Tilisarao, localidad ubicada en el Valle de Conlara.
Los investigadores aseguraron que el cuerpo estaba con vida al momento de que el fuego tomará por completo el vehículo.
Guillermo, tío del acusado, aseguró que el sospechoso «tuvo una transformación en su personalidad desde hace varios años» e indicó que «había amenazado montones de veces» al fallecido para poder quedarse con el campo familiar.
“Me tiraba lajas y piedras desde arriba del techo al patio, me golpeaba las paredes y yo ya no hacía denuncias en la comisaría. Iba a avisar nomás y les decía: ‘¿Qué están esperando? ¿Que pase una desgracia?’ Ahora lo pienso y la víctima pude haber sido yo”, relató.
¿Cómo sigue la causa?
Pablo Ashworth seguirá detenido con prisión preventiva como acusado del homicidio de su padre, informaron fuentes judiciales. El juez de Garantías 2 de la Tercera Circunscripción puntana, Jorge Pinto, le imputó el delito de «homicidio agravado por el vínculo».
A principios del mes pasado «Tedy» Ashworth fue hallado carbonizado en el interior de su camioneta incendiada, en una zona rural del departamento de Chacabuco, a unos 140 kilómetros de la ciudad de San Luis.
Según las fuentes, al juez dispuso la prisión preventiva del hijo de la víctima por 120 días a pedido del Ministerio Público Fiscal y dispuso su traslado a la Penitenciaria local.
Para requerir la prisión preventiva, la fiscalía sostuvo la existencia de riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación y peligro de fuga.
«Entendemos que la prisión preventiva para el acusado es el único medio para poder finalizar con la etapa investigativa y no se entorpezca la investigación, además para cuidar a toda la gente que está aportando información, que hoy se anima a hablar y que antes no lo hacía por miedo», expresaron durante el plenario la fiscal de Instrucción Débora Antonella Roy Gitto y la fiscal Adjunta, Lorena Ohanian.
Roy Gitto también mencionó que «Tedy» iba a denunciar a su hijo y a pedir una restricción de acercamiento.
Por otro lado, el abogado defensor, Daniel Flores, solicitó la liberación del hijo del veterinario por falta de mérito, ya que los resultados de la autopsia aún no están listos debido al estado del cuerpo y no se puedo constatar si pertenece o no al padre del acusado.
Sobre la identificación de la víctima, la fiscal dijo que fue posible gracias a una placa de osteosíntesis en la zona cervical, operación a la que «Teddy» se había sometido y que fue acreditada por su familia con estudios médicos, su historia clínica y un número de serie que tenía la placa que correspondía a la que le habían puesto a Ashworth padre.
La víctima era un reconocido médico veterinario, se había jubilado como jefe de la Agencia de Extensión Rural del INTA Concarán y fue docente en la Escuela Técnica 51 de la localidad de Naschel.